El caso se originó el pasado 16 de junio, cuando vecinos reportaron a través del sitio web del Ministerio Público Fiscal la presencia de varios perros en estado crítico de desnutrición, deambulando por la calle Abraham Cornejo y otras zonas del pueblo.
La denuncia incluyó imágenes y testimonios que evidenciaban el deterioro de los animales.
Personal de la Comisaría 2 de Molinos acudió al domicilio señalado, donde entrevistó a un hombre de 63 años, empleado municipal, quien reconoció ser propietario de aproximadamente 60 perros.
Reproducción sin control
Explicó que muchos de ellos eran resultado de una reproducción no controlada, mientras que otros habían sido rescatados de la calle.
Durante la inspección externa del inmueble, los efectivos constataron la presencia de animales en condiciones precarias: visiblemente desnutridos, en un ambiente de hacinamiento y sin las condiciones mínimas de higiene.
Ante la gravedad del cuadro, desde la Fiscalía Penal de Cachi se intimó al propietario a mejorar en un plazo de 72 horas las condiciones de alojamiento, alimentación y cuidado de los perros. También se ordenó un relevamiento vecinal para ampliar el marco testimonial del caso.
Según lo registrado en las actuaciones, el propio denunciado habría solicitado al intendente de Molinos un espacio físico donde trasladar a los animales y poder brindarles mejores condiciones de vida.
En paralelo, el fiscal Escalante resolvió derivar la causa al Centro de Mediación Penal de Cachi como una vía preliminar para encontrar soluciones rápidas y efectivas que garanticen el resguardo de los animales.
La Fiscalía continuará monitoreando el cumplimiento de las medidas y no descarta avanzar con otras acciones judiciales si se constata alguna irregularidad.
