En un movimiento estratégico, el frente Provincias Unidas desembarcó en la Ciudad de Buenos Aires con un acto político que reunió a gobernadores, candidatos y referentes del espacio. El objetivo fue claro: mostrar músculo territorial en un distrito históricamente adverso y posicionarse como una alternativa nacional de cara a las elecciones.
El evento se realizó en el barrio de San Telmo y contó con la presencia de figuras como Martín Lousteau y Graciela Ocaña, quienes encabezan la propuesta porteña del frente. La convocatoria buscó visibilizar el crecimiento de Provincias Unidas fuera de sus bastiones provinciales y marcar presencia en la capital del país.
Los gobernadores que integran el espacio —entre ellos Juan Schiaretti, Gustavo Bordet y Martín Llaryora— destacaron la necesidad de construir una opción política que represente los intereses del interior y promueva una agenda federal. “No venimos a confrontar, venimos a sumar”, expresó uno de los mandatarios presentes.
La presentación en CABA se enmarca en una estrategia de expansión que incluye listas propias en más de 15 distritos y una proyección legislativa que aspira a consolidar entre 17 y 20 diputados. El frente busca instalarse como una fuerza de centro, alejada de los extremos y enfocada en la gestión y el diálogo.
En el acto, se hizo hincapié en temas como la coparticipación, el desarrollo regional y la necesidad de equilibrar el poder político entre el AMBA y el resto del país. “Queremos una Argentina más justa, donde las provincias tengan voz y voto”, señalaron los oradores.
La irrupción de Provincias Unidas en la Ciudad representa un desafío para los espacios tradicionales, que deberán competir con una propuesta que combina experiencia de gestión y discurso federal. El frente apuesta a captar votantes desencantados con la polarización y ofrecer una alternativa con anclaje territorial.
Con este desembarco, Provincias Unidas refuerza su perfil nacional y se posiciona como un actor relevante en el escenario electoral. La campaña continúa, pero el mensaje fue claro: el interior también quiere jugar en la Ciudad.
Redacción Diario Inclusión.