En una declaración cargada de simbolismo político, Patricia Bullrich afirmó que Argentina atraviesa su “segunda oportunidad” de cambio profundo, tras la experiencia del gobierno de Mauricio Macri y el actual mandato de Javier Milei. “No vamos a tener una tercera”, sentenció la ministra de Seguridad, en un claro llamado a consolidar el modelo libertario sin margen para el error.
La frase fue pronunciada durante un acto público, donde Bullrich defendió la alianza con Milei como una continuidad del intento reformista iniciado en 2015. Según la funcionaria, el país desperdició la primera oportunidad por falta de decisión política, y ahora debe avanzar sin titubeos en la desregulación, el orden fiscal y la modernización del Estado.
Bullrich también hizo referencia a la resistencia que enfrenta el gobierno en distintos sectores, y advirtió que “los que quieren volver al pasado” están organizados para bloquear el cambio. En ese sentido, pidió respaldo ciudadano y unidad política para sostener las reformas, incluso frente a las críticas internas dentro del PRO y la oposición.
La ministra se mostró alineada con el discurso de Milei, aunque marcó diferencias en el estilo. “No se trata de insultar, sino de transformar con ideas claras”, expresó, en lo que fue interpretado como un gesto de moderación frente a los exabruptos del presidente. Aun así, ratificó su compromiso con el rumbo libertario y descartó cualquier ruptura.
Las palabras de Bullrich generaron repercusiones en el arco político. Algunos referentes del PRO consideraron que la frase “no habrá una tercera oportunidad” implica una presión innecesaria sobre el gobierno, mientras que otros la interpretaron como un sinceramiento de la fragilidad institucional que atraviesa el país.
En redes sociales, la frase se viralizó rápidamente y fue utilizada tanto por defensores como por detractores del gobierno. Para unos, representa la urgencia de actuar sin concesiones; para otros, una señal de que el margen de maniobra democrática se reduce peligrosamente.
La ministra concluyó su intervención con un llamado a “no perder el tiempo en disputas menores” y a “honrar el mandato de cambio que la sociedad eligió”. En un contexto de alta polarización, sus palabras refuerzan la narrativa de que el gobierno de Milei es la última chance para transformar el país desde una perspectiva liberal.
Redacción Diario Inclusión.










