La medida determinada por el Ministerio de Salud de la Nación es acertada según los profesionales, ya que atiende directamente a quienes requieren un tratamiento crónico.
El Ministerio de Salud de la Nación decidió permitir que algunos pacientes con tratamientos crónicos utilicen recetas de papel enviadas por WhatsApp o mediante fotos hasta el 28 de febrero de 2023.
En diálogo con El Tribuno, el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Salta, Mario Assad, indicó que «con la derogación del decreto se vuelve a marzo del 2020 porque se terminó el ASPO (Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio) y ya era hora que se termine el tema de las recetas digitales, porque eso fue en un contexto de emergencia en el que se hicieron cosas para adecuarse a la situación».
«Sentimos que el ministerio tal vez se apresuró con la medida ya que no contempló a la gente que está con las recetas digitales que el médico ya hizo». Puso como ejemplo que un médico psiquiatra hace recetas por un período de tres meses y que, en el caso de que encima el profesional se hubiera ido de vacaciones, queda el paciente desamparado.
Detalló que atendiendo ese tipo de situaciones para los tratamientos crónicos, hay mucha gente con la receta en la mano que todavía no compró la medicación, entonces es por eso que se prorrogó hasta el 28 de febrero solamente para tratamientos crónicos.
Por su parte, las obras sociales que son financiadoras del sistema de salud, aceptaron recibir las recetas digitales hasta fin de año algunas y hasta el 27 de diciembre pasado otras. «Eso ya fue informado a las farmacias para que tengan un panorama ya que, IPS por ejemplo, la va a recibir hasta fin de año», explicó Assad.
«Estamos de acuerdo en que se haya prorrogado para estos casos de tratamientos crónicos, es una medida favorable», insistió y remarcó que lo ideal hubiera sido que el decreto inicial establezca este plazo, para evitar confusiones.
La jefa de Gabinete de la cartera sanitaria nacional, Sonia Tarragona, dijo que se trata de una excepcionalidad para quienes tengan impedimentos de traslado y no cuenten con la posibilidad de generar una nueva prescripción.
«Dejan de ser válidas las fotos de las recetas que no son recetas digitales. Son recetas en papel que se envían por medios electrónicos», aclaró Tarragona, y continuó: «Siguen vigentes y son válidas todas las modalidades de las recetas electrónicas y en papel que se están utilizando que son en la mayoría de las provincias, en todos los financiadores públicos, en la mayoría de la seguridad social y en el sector público».
El pasado lunes, a través de la resolución 3622/2022 publicada en el Boletín oficial, el Gobierno informó la eliminación del uso de fotos de las recetas médicas de papel para comprar un medicamento o solicitar un tratamiento.
Por ello, la funcionaria diferenció las recetas digitales, que cuentan con firma electrónica, de las que son enviadas por medios electrónicos a través de fotografías o impresiones, pero que fueron escritas en papel.