Incluyen el sostenimiento de tasas de origen y años de gracias para que los productores puedan recomponer sus riesgos.
En lo que atiene al Banco Nación, el paquete de medidas, que según Batakis estarán vigentes desde este miércoles, incluye la disposición de $50.000 millones, en líneas de crédito para productores que se encuentran abarcados por la emergencia. «Tenemos una línea especifica para el sector agropecuario pyme que está vigente y que tiene una tasa promedio del 40,6%«, indicó la presidenta del BNA.
Como parte de las medidas, «se van a sostener las tasas de origen» sin modificarlas, y se otorgará «un año de plazo de gracia para que los productores tengan ese periodo para recomponer sus ingresos y empiecen a devolver (el crédito) recién el año que viene», explicó.
Otra medida, precisó Batakis es una línea nueva donde pondrán a disposición $20.000 millones a una tasa de interés del 49,5%, y que también posee un año de gracia.
Por otro lado, atendiendo a un reclamo de los productores, la presidenta del banco señaló que el arrendamiento del campo será considerado como capital de trabajo, permitiendo su ingreso a líneas estipuladas para la compra de insumos como fertilizantes.
«Uno no puede paliar la sequia extrema que está viviendo Argentina y que es histórica, pero si ponernos a disposición con todas las herramientas«, afirmó Batakis esta mañana en diálogo con Radio 10. En ese marco también explicó que las medidas anunciadas el pasado martes por Massa implicaron un «trabajo intenso de dos semanas».
«De todos los puntos que se pedían en esa convocatoria que se hace originalmente (en el INTA de Castelar), fuimos respondiendo a muchos de los puntos«, valoró la titular del BNA.
Vínculo con la Mesa de Enlace
Según Batakis, las entidades de la Mesa de Enlace tuvieron una «respuesta positiva reconociendo que finalmente se había cumplido, e incluso con mayor respuesta, a lo que ellos venían pidiendo». «Se fueron muy satisfechos con lo que se anunció ayer», dijo la ex titular del Palacio de Hacienda, y señaló que los ruralistas también «celebraban el hecho de estar sentados en una mesa de diálogo y que en dos semanas se les diera respuesta».
También destacó que, además de la Mesa de Enlace, hubo «distintas asociaciones vinculadas con el campo que nunca habían estado sentadas en una mesa como estas», y que la idea es que «la reunión no sea la última y que se siga trabajando».
