En una cálida noche en Miami, la Selección Argentina volvió a demostrar por qué sigue siendo una de las grandes potencias del fútbol mundial. Con un planteo ordenado, momentos de brillo colectivo y una defensa firme, la Albiceleste venció 1-0 a Venezuela en un amistoso que dejó más certezas que dudas.
El gol llegó a los 63 minutos del segundo tiempo, tras una jugada elaborada que culminó Giovani Lo Celso con un remate preciso dentro del área. El mediocampista del Real Betis celebró apuntando al cielo y luego dedicó el tanto al entrenador Miguel Ángel Russo, en un gesto que emocionó a los presentes.
Aunque el resultado fue ajustado, el desarrollo del partido mostró la superioridad del conjunto dirigido por Lionel Scaloni, que controló la posesión y generó las principales oportunidades. Venezuela, pese a su esfuerzo, solo inquietó en algunos pasajes del complemento, encontrándose con la firmeza de Emiliano “Dibu” Martínez, quien volvió a destacarse con atajadas decisivas.
Sin Messi, pero con identidad intacta
El encuentro tuvo una ausencia notable: Lionel Messi no fue parte del plantel por precaución física y siguió el partido desde un palco, acompañado por su familia. Su figura, sin embargo, estuvo presente en los cánticos y banderas de los hinchas argentinos que coparon el estadio.
Sin el capitán, el equipo mostró un funcionamiento aceitado y una clara idea de juego. Rodrigo De Paul y Enzo Fernández manejaron los tiempos en el mediocampo, mientras que Ángel Di María, siempre desequilibrante, fue uno de los puntos altos en el primer tiempo. También hubo minutos importantes para jóvenes como Alejandro Garnacho y Valentín Carboni, a quienes Scaloni busca consolidar como recambios naturales de cara al futuro.
Scaloni: “Lo importante no es cómo está el equipo hoy, sino cómo llegará al Mundial”
Tras el triunfo, Lionel Scaloni valoró el rendimiento del grupo, aunque reconoció que todavía hay aspectos por mejorar:
“El primer tiempo fue bastante bueno. En el segundo perdimos un poco de intensidad, pero estos partidos sirven para probar jugadores y alternativas. Lo importante no es cómo está el equipo hoy, sino cómo llegará al Mundial”, declaró el técnico en conferencia de prensa.
El entrenador también remarcó la actitud del plantel y la competencia interna por los lugares: “Es difícil elegir. Hay chicos que cada vez que entran lo hacen bien, y eso habla del compromiso que tienen con la selección”.
Un gesto que recorrió el mundo
Uno de los momentos más comentados de la noche no ocurrió en el campo de juego, sino en las tribunas. Durante un momento de pausa, “Dibu” Martínez se acercó al público y le regaló su camiseta a un niño que lo alentaba desde la primera fila. El emotivo intercambio se viralizó rápidamente en redes sociales, reflejando la conexión especial que el arquero mantiene con los hinchas.
Próximo desafío: Puerto Rico y la mirada en 2026
Con esta victoria, Argentina extiende su invicto y continúa ajustando detalles de cara a la Copa Mundial 2026, donde defenderá el título obtenido en Qatar. El próximo compromiso será el martes 14 de octubre, frente a Puerto Rico, en el Chase Stadium de Florida.
Allí, Scaloni planea dar minutos a varios futbolistas que no jugaron ante Venezuela, con el objetivo de seguir evaluando rendimientos antes de definir la lista definitiva para la cita mundialista.
En tanto, Venezuela, que atraviesa un proceso de recambio tras quedar fuera del Mundial, mostró un equipo ordenado y con potencial, pero aún lejos del nivel competitivo que exige la élite internacional.
Un equipo que no pierde su esencia
Más allá del resultado, lo que se vio en Miami fue una selección argentina con la misma identidad que la llevó a la gloria: presión alta, compromiso colectivo y una conexión inquebrantable entre jugadores y público.
Aun sin su máxima figura, el equipo de Scaloni volvió a demostrar que el espíritu campeón sigue intacto. Y con el horizonte puesto en 2026, cada amistoso se convierte en una nueva página de una historia que, por ahora, sigue escribiéndose con victorias.
Redacción: Diario Inclusión.