La esperada visita de Lionel Messi a la India, que había generado una enorme expectativa entre miles de fanáticos, terminó envuelta en disturbios, vandalismo y un fuerte escándalo organizativo. Lo que debía ser una celebración histórica por la presencia del capitán campeón del mundo derivó en desorden dentro del estadio, intervención policial y la posterior detención del principal organizador del evento.
El episodio ocurrió en el Salt Lake Stadium de Calcuta, donde Messi se presentó en el marco de una gira promocional. Desde horas tempranas, el recinto estuvo colmado por una multitud que aguardaba ver al futbolista argentino, muchos de ellos tras haber pagado entradas de alto costo.
Una aparición mucho más breve de lo anunciado
Según lo previsto, Messi debía permanecer cerca de 45 minutos en el estadio, interactuar con el público y participar de distintas actividades protocolares. Sin embargo, su presencia se redujo a poco más de 20 minutos.
El futbolista ingresó al campo acompañado por Luis Suárez y Rodrigo De Paul, saludó brevemente a los asistentes y recorrió parte del estadio. No obstante, la falta de contacto directo con el público y la rápida retirada del astro generaron un profundo malestar entre los presentes.
Muchos aficionados manifestaron su frustración al no poder ver claramente a Messi, ya que su figura quedó rodeada por personal de seguridad, funcionarios y organizadores que bloquearon la visibilidad desde las tribunas.
Enojo, disturbios y vandalismo
Tras la salida anticipada de Messi, el clima en el estadio se tornó cada vez más tenso. La frustración de los asistentes derivó en disturbios dentro del recinto, con hinchas que comenzaron a arrojar botellas y distintos objetos hacia el campo de juego.
En medio del caos, se registraron daños en las instalaciones, incluyendo butacas arrancadas y sectores del estadio vandalizados. La situación obligó a la intervención de las fuerzas de seguridad, que procedieron a evacuar el lugar para evitar que los incidentes se agravaran.
Ante el riesgo para la integridad del jugador, el operativo de seguridad aceleró la salida de Messi del estadio, escoltándolo fuera del lugar.
Detención del organizador e investigación oficial
Como consecuencia de los graves incidentes, la policía detuvo al principal organizador del evento, acusado de una deficiente planificación y de no garantizar las condiciones mínimas de seguridad y logística.
Las autoridades iniciaron una investigación para determinar responsabilidades y evaluar posibles sanciones. Además, se informó que los organizadores se comprometieron a reembolsar el valor de las entradas a los asistentes afectados.
Disculpas oficiales y repercusiones políticas
El escándalo generó una fuerte repercusión a nivel institucional. La jefa del gobierno regional de Bengala Occidental ofreció disculpas públicas tanto a Lionel Messi como a los fanáticos por lo ocurrido y aseguró que se revisarán los protocolos para evitar que situaciones similares vuelvan a repetirse.
El episodio dejó al descubierto serias falencias en la organización del evento y opacó lo que debía ser una jornada histórica para el fútbol en la India.
Incertidumbre sobre el resto de la gira
La visita de Messi forma parte de una gira que contempla otras ciudades del país, con actividades deportivas y promocionales. Sin embargo, lo sucedido en Calcuta encendió las alarmas sobre la logística y la seguridad de los próximos eventos, que ahora se encuentran bajo estricta revisión.
De esta manera, la primera aparición del astro argentino en la India quedó marcada no por la emoción de los fanáticos, sino por el caos, los disturbios y una organización que no estuvo a la altura de la expectativa generada.
Redacción: Diario Inclusión.









