Cuando parecía que el futuro de Sergio «Checo» Pérez en Red Bull estaba sentenciado, el poderío económico del mexicano y sus patrocinadores le permitirían continuar en la categoría, con lo que se cerrarían las chances de Franco Colapinto de mantenerse en la Fórmula 1 en 2025.
Con la butaca de Sauber confirmada para el brasileño Gabriel Bortoleto, la prinicipal opción para Colapinto en la próxima temporada pasa por llegar a Red Bull, en alguna de las dos escudería, la principal o la subsidiaria Racing Bull. Allí está la única vacante disponible, ya que el equipo todavía no confirmó a Liam Lawson como compañero de equipo de Yuki Tsunoda, aunque todas los indicios conducen a esa situación. Por eso, las posibilidades del argentino se basan en el eventual despido de Pérez, que tiene contrato hasta 2026, pero que su mala temporada provocó que las autoridades del equipo especularan con su salida. En ese caso, el hueco que se abriría sería cubierto por Colapinto, para cualquiera de los dos equipos.
Sin embargo, en las últimas horas el panorama cambió, con la cada vez más firme oportunidad para que Checo Pérez siga en la escudería austríaca. De acuerdo a lo que publicó el diario español Marca, «el equipo de Horner habría dado recientemente el OK a los nuevos patrocinadores del mexicano para el próximo año».
Sobre estos patrocinadores, el medio español reveló que «alguno es muy potente y en Red Bull le han dado el visto bueno para ir haciendo la ropa y los productos de merchandising recientemente… En este sentido, las cuentas están más que claras. Las marcas que «Checo» lleva asociadas pagan su salario de más de 10 millones de dólares y dejan una cantidad en las arcas de Red Bull que puede estar rondando el doble, algo similar a los 30 millones de dólares en total». Esos números contrastan con los 20 millones que tendría que pagarle Red Bull a Williams para conseguir la liberación del argentino.
Si se confirma la continuidad de Pérez, esa situación representaría un gran golpe para la llegada de Colapinto a Red Bull. De esa manera, el único asiento vacío es el de Racing Bull, y sería ocupado por el neozelandés Liam Lawson, piloto de la Academia Red Bull y actual dueño de la butaca.
En ese caso, la opción que le quedaría al argentino para continuar en la Fórmula 1 en 2025 sería la escudería francesa Alpine, que ya tiene sus pilotos confirmados para la próxima temporada. Por eso, para concretar la llegada de Colapinto, Alpine debería dar marcha atrás con el arribo del australiano Jack Doohan, que actualmente es el piloto de pruebas. Según el medio italiano La Gazzetta Dello Sport, el asesor de Alpine, Flavio Briatore, ve como una opción más prometedora al argentino.
Colapinto debutó a mitad de temporada en la Fórmula 1 para reemplazar al estadounidense Logan Sargeant y tuvo muy buenas actuaciones, que le permitieron sumar cinco puntos en el campeonato (cuatro por terminar octavo en Azerbaiyán y uno por finalizar décimo en Estados Unidos). Las últimas carreras de la temporada, que se llevarán a cabo en Las Vegas, Qatar y Abu Dhabi, serán una gran chance para que Colapinto termine de demostrar que está a la altura de la categoría. Si finalmente no se abre el hueco, Colapinto quedará como piloto de reserva de Williams, hará pruebas a lo largo del año y se abocará a sumar horas en el simulador, a la espera de que se genere la chance de subirse de nuevo a un Fórmula 1 en 2026.