Racing ganó cuando y como quiso. Jugó un tiempo, dejó pasar el otro y construyó ante Aldosivi en Mar del Plata una victoria por 2 a 0 sin sobresaltos que le permite seguir en la pelea por una plaza en los octavos de final del Torneo Apertura (ver posiciones). Adrián «Maravilla» Martínez de penal y Santiago Solari marcaron los goles en el primer tiempo. El segundo se pareció demasiado a un pacto de no agresión entre el conformismo de Racing y la impotencia del equipo marplatense.
Fue notable la diferencia entre un equipo como Racing, que juega la Copa Libertadores, y otro como Aldosivi que da pelea para quedarse en Primera. Las distancias quedaron subrayadas casi desde el giro inicial de la pelota. Acaso porque después de la derrota copera ante Bucaramanga, la Academia mostró una determinación y una energía para recuperar la pelota y jugar que habitualmente no demuestra en el torneo local.
Racing encontró líneas de pase por todos lados, cubrió bien la cancha para atacar y defender y con la cercanía de Adrián «Toto» Fernández (exSan Telmo) en su primer partido como titular, abasteció a Maravilla Martínez. El goleador marcó de penal (por mano en el área) el primer gol de la tarde a los diez minutos y a los 34 sacó un centro desde la izquierda para que Solari convierta entrando por el segundo palo. En este contexto, Aldosivi casi que no pudo hacer nada. Cuando tuvo que defender, le faltó rigor en la marca y no supo si apretar en el medio o esperar metido atrás. Cuando tuvo la pelota, la perdió muy rápido. Un zurdazo recto de Lautaro Chávez que Arias detuvo sin exigirse demasiado fue su única llegada.
En comparación con la buena imagen que dejaron ante Argentinos (2-0) y Huracán (3-3), los marplatenses parecieron desdibujados en ese primer tiempo, fuera de registro. Repuntaron en el segundo. Pero fue más porque Racing se lo posibilitó que por mérito propio. La Academia sabía que la tarea había sido hecha y que el triunfo no corría riesgos. Por eso, bajó la intensidad, dividió la pelota, se dispersó mentalmente y se limitó a esperar a Aldosivi que quedó expuesto en todas sus limitaciones. El equipo del puerto se arrimó al área de Racing pero más que eso no pudo hacer. Arias solo atajó tiros desde afuera del área y descolgó centros.
Tampoco Carranza tuvo mucho trabajo. Racing no lo atacó casi nunca y lo único que tuvo que hacer fue contener un remate de Salas luego de una escapada. En verdad, el segundo tiempo estuvo de más. El partido se resolvió en el primero y allí quedaron subrayadas las diferencias de jerarquía entre un equipo que apunta a lo más alto y otro que tendrá que hacer un gran esfuerzo para poder quedarse en Primera.
