La industria metalúrgica argentina volvió a encender las alarmas en octubre, al registrar una caída interanual del 4,6% y un desplome en el uso de la capacidad instalada al 44,3%, el nivel más bajo desde los peores meses de la pandemia en 2020. El informe de ADIMRA reveló que el sector perdió todo el terreno recuperado desde mediados de 2024 y se encuentra 17,7% por debajo de los máximos de 2023.
El panorama provincial muestra una crisis extendida: Buenos Aires lideró las pérdidas con una caída del 7,7%, seguida por Mendoza (-4,4%), Córdoba (-3,7%) y Santa Fe (-2,2%). Solo Entre Ríos logró una leve variación positiva del 0,5%. En el acumulado anual, la actividad apenas creció 0,1%, lo que confirma el estancamiento productivo.
Por sectores, Fundición encabezó las bajas con un derrumbe del 12,7%, seguido por Equipos Eléctricos (-8,6%), Bienes de Capital (-3,9%) y Autopartes (-2,5%). Incluso rubros que habían impulsado el repunte del primer semestre, como Maquinaria Agrícola, mostraron retrocesos. Carrocerías y Remolques creció 2,6%, pero desaceleró respecto a meses anteriores.
Elio Del Re, presidente de ADIMRA, advirtió que “la industria atraviesa un momento muy complejo, con niveles de actividad excepcionalmente bajos y con importaciones que crecieron alrededor del 70% interanual”. Reclamó una política industrial seria que proteja el empleo y el desarrollo local.
Las expectativas empresariales son sombrías: el 67,4% de las firmas prevé que su producción se mantenga o disminuya, y el 83,3% no planea aumentar su plantilla. El empleo sectorial cayó 2,9% interanual y 0,1% mensual. La presión externa también se intensifica: en septiembre, las importaciones metalúrgicas alcanzaron USD 2.717 millones, un 42,6% más en volumen que el mismo mes de 2024.
En contraste, las exportaciones totalizaron apenas USD 416 millones, con una baja del 5,7% interanual. Este desequilibrio comercial agrava la situación de las fábricas locales, que enfrentan una competencia desleal y un mercado interno debilitado.
La industria metalúrgica, considerada uno de los pilares del entramado productivo argentino, atraviesa una etapa crítica. Sin señales de recuperación a corto plazo, el sector exige medidas urgentes para evitar un mayor deterioro en el empleo, la inversión y la soberanía industrial.
✍️ Redacción Diario Inclusión










