La liquidación de divisas del sector agroexportador se desplomó en octubre, encendiendo luces de alerta en el equipo económico. Según datos de CIARA y CEC, las empresas del agro ingresaron apenas u$s1.117 millones, una caída del 84% respecto a septiembre y del 56% interanual. El desplome se da tras el fin del régimen de retenciones cero que había impulsado un adelanto masivo de exportaciones.
El dato llega en un momento políticamente favorable para el Gobierno, tras su victoria en las legislativas, pero complica el frente financiero. Con reservas netas negativas por casi u$s11.000 millones y vencimientos por u$s4.200 millones en enero, el Ejecutivo necesita reforzar el ingreso de divisas para evitar tensiones cambiarias.
El acumulado anual de agroexportaciones entre enero y octubre asciende a u$s29.564 millones, un 40% más que en 2024. Sin embargo, gran parte de ese flujo ya fue anticipado, y se estima que hasta fin de año las liquidaciones no superarán los u$s50 millones diarios.
De cara a los próximos meses, se espera que la cosecha de trigo aporte u$s3.300 millones, con ingresos concentrados entre diciembre y marzo. La cebada sumaría entre u$s300 y u$s400 millones, mientras que los remanentes de soja, maíz y girasol podrían aportar otros u$s3.100 millones.
Ante este panorama, el Gobierno apuesta a conseguir dólares frescos mediante financiamiento externo. Según el economista Federico Machado, se buscará ampliar el REPO con bancos internacionales, utilizar recursos del FMI o del swap con China, y como última opción, recurrir al mercado de cambios.
Además, se analiza una recompra de bonos con vencimientos cercanos para reducir el riesgo país, que actualmente ronda los 600 puntos. Sin esa operación y sin refuerzo de reservas, será difícil perforar el piso de 500 puntos alcanzado meses atrás.
✍️ Redacción Diario Inclusión.










