La caída del dólar en los últimos días reavivó el debate entre analistas financieros sobre la estrategia cambiaria del Gobierno. Con un mercado más calmo y menor presión sobre el tipo de cambio, crecen las expectativas de que el ministro Luis Caputo retome las compras de divisas para fortalecer las reservas internacionales del Banco Central.
Durante las últimas semanas, el Tesoro se mantuvo activo en el mercado, realizando adquisiciones puntuales de dólares. Sin embargo, la intervención oficial fue moderada, en parte por la necesidad de sostener la estabilidad cambiaria y evitar movimientos bruscos que afecten la inflación. Ahora, con un escenario más favorable, los especialistas consideran que es el momento propicio para acumular reservas.
Según fuentes del mercado, la baja del dólar responde a una combinación de factores: menor demanda de cobertura, liquidación de exportaciones y señales de disciplina fiscal por parte del Gobierno. Este contexto genera una ventana de oportunidad para que el Banco Central refuerce su posición sin alterar el equilibrio financiero.
Luis Caputo, quien ha mantenido un perfil activo en la gestión económica, enfrenta el desafío de consolidar la confianza en el peso y garantizar la sostenibilidad del programa monetario. La acumulación de reservas es vista como un paso clave para avanzar hacia una eventual flexibilización del cepo cambiario y mejorar la capacidad de intervención ante shocks externos.
Algunos economistas advierten que el ritmo de compras deberá ser cauteloso, para no generar expectativas devaluatorias ni alimentar la brecha entre el dólar oficial y los paralelos. En ese sentido, recomiendan una estrategia gradual, coordinada con el Tesoro y en línea con los objetivos del acuerdo con el FMI.
Mientras tanto, el mercado sigue de cerca los movimientos del Banco Central y las declaraciones del ministro. La posibilidad de que se retomen las compras de dólares genera expectativas positivas entre los inversores, que ven en esta medida una señal de fortalecimiento institucional y previsibilidad macroeconómica.
La decisión final dependerá de la evolución de las variables clave: tipo de cambio, inflación, flujo de exportaciones y desembolsos externos. Pero todo indica que Caputo tiene margen para actuar y que el Gobierno buscará aprovechar el momento para consolidar su estrategia financiera.
Redacción Diario Inclusión










