La postura del Gobierno
Asimismo, la intención del Gobierno es poner un tope para los aumentos de tarifas del 9,9% final para los usuarios por encima de la inflación a partir de abril.
En el caso de que esa postura prospere, las propuestas de las empresas deberían ser rechazadas y sus planes de inversiones se tendrán que ajustar a una menor disponibilidad de ingresos.
El transporte de gas tiene un peso cercano al 16% en la factura final de los usuarios, mientras que el costo propio de la producción o las importaciones de gas alcanza el 27%, el margen de distribución un 34% y los impuestos un 23%.