El mes de octubre llega con una batería de aumentos que afectan directamente el presupuesto de los hogares argentinos. Desde colegios privados hasta alquileres, pasando por medicina prepaga, transporte público y combustibles, el nuevo ciclo inflacionario se instala en servicios básicos, sin que medie una recomposición salarial generalizada.
Los alquileres regulados por la derogada Ley de Alquileres tendrán un ajuste del 46,1%, según el Índice de Contratos de Locación (ICL). Aunque la suba muestra una desaceleración respecto a meses anteriores, sigue representando una carga significativa para los inquilinos, que destinan gran parte de sus ingresos a vivienda.
Las empresas de medicina prepaga aplicarán aumentos de entre 1,9% y 2,4% en octubre, incluyendo copagos. Además, el Gobierno habilitó el uso de excedentes de aportes por parte de los afiliados, una medida que busca aliviar el impacto pero que no modifica el alza estructural del sistema privado de salud.
En el ámbito educativo, los colegios privados con subvención estatal en CABA aumentarán sus cuotas un 2,1%. Los valores van desde $37.649 en nivel inicial hasta $259.072 en secundarios técnicos, según el porcentaje de subsidio. La educación, lejos de ser un derecho garantizado, se encarece mes a mes.
El transporte público también se encarece. En Provincia de Buenos Aires, el boleto mínimo de colectivo sube a $550,09, mientras que en CABA alcanza los $546,66. El subte pasa de $1.071 a $1.112,76 y el premetro a $389,46. La movilidad urbana se convierte en otro factor de presión para los trabajadores.
A esto se suman aumentos en servicios de cable, telefonía e internet, con subas de hasta 3%, y un posible ajuste en combustibles por la actualización del impuesto a los líquidos. Aunque YPF dejó de informar precios, se estima un alza de hasta 7% según analistas del sector.
La luz y el gas también esperan retoques, estimados en torno al 1,9%, en línea con la inflación de agosto. El esquema de Revisión Quinquenal de Tarifas (RQT) prevé aumentos mensuales durante 30 meses, consolidando una dinámica de ajuste silencioso que erosiona el poder adquisitivo.
Redacción Diario Inclusión