La influencer y modelo Marta Fort conmovió a sus seguidores al compartir un mensaje profundo y sincero sobre el difícil proceso de crecer sin el acompañamiento y la confianza de su entorno familiar. La joven, hija del recordado empresario y mediático Ricardo Fort, reveló que atraviesa un momento de angustia y soledad que ni el dinero ni los viajes pueden disimular.
“Es inevitable para mí no sentirme en soledad y triste cuando, dentro de mi propia familia, la única que me quedó y en la que tendría que encontrar complicidad, hay personas que no quieren verme crecer, cuando son las que más necesito que confíen en mi capacidad y me impulsen”, escribió en sus redes.
Marta señaló que muchas veces su esfuerzo y sus logros no son reconocidos y que eso genera distancia emocional: “Lo que para mí representa un camino de esfuerzo y compromiso, para otros se convierte en amenaza o motivo de conflicto. Y cuando menos conflicto hay, es porque menos cercanía hay”.
El mensaje se difundió pocos días después del 5 de noviembre, fecha que siempre la moviliza por tratarse del cumpleaños de su padre, quien falleció cuando ella tenía solo nueve años. En ese contexto, Marta compartió un video de una Navidad familiar y recordó cuánto extraña compartir su presente con él: “Me mudé, empecé a adentrarme en la empresa familiar, cumplí logros personales y laborales que jamás hubiera imaginado, pero hay una persona con la que me hubiera gustado compartir esta etapa y hoy no está”.
La influencer describió cómo la ausencia se hace más fuerte en soledad: “A veces me encuentro sola, con miedo, con incertidumbre sobre lo que se viene. En esos momentos es cuando más lo extraño y más necesito tener a alguien con quien contar”.
Finalmente, dedicó un homenaje a Fort: “No importa cuánto tiempo pase, siempre lo voy a recordar. Siempre voy a tener la necesidad de recurrir a mi papá en los momentos importantes”.
Un mensaje que evidencia que la fama y el bienestar económico no reemplazan el acompañamiento afectivo, y que el dolor por la ausencia puede reaparecer incluso en los años de mayor crecimiento personal.
Redacción Diario Inclusión










