El presidente de Brasil anunció que quiere postular al exjuez federal en la primera oportunidad que se abra para ocupar un asiento en la Corte Suprema, lo que sucederá en noviembre del año próximo.
El mandatario sí aclaró que la primera banca del máximo tribunal del país que se libera es la del juez y actual decano del cuerpo, Celso de Mello, quien debe jubilarse en noviembre de 2020.
Moro es uno de los ministros con mayor perfil público del gobierno de Bolsonaro y su nombre está íntimamente ligado a la condena y el encarcelamiento del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva por corrupción.
Como juez federal de primera instancia, Moro encabezó la operación judicial conocida como Lava Jato
, que destapó una red nacional de corrupción entre figuras del gobierno del Partido de los Trabajadores (PT) y empresarios aliados.
Aunque el Lava Jato reveló múltiples casos millonarios de corrupción, aliados y rivales del ex presidente Lula cuestionaron su condena por considerar que Moro había ido muy lejos y lo había condenado sin evidencia física.
La condena de Moro fue esencial para que la Justicia Electoral vete a Lula, por entonces el favorito en las encuestas, como candidato presidencial.
Por eso, varias voces opositoras cuestionaron la decisión posterior del presidente Bolsonaro de nombrarlo como ministro de Justicia.