Un ex gerente de la empresa petrolera estatal brasileña Petrobras fue detenido, acusado de recibir sobornos por parte de empresas constructoras, en la fase número 39 de la Operación Lava Jato, que lleva adelante el juez Sergio Moro, de la ciudad de Curitiba.
En conferencia de prensa, fiscales y comisarios de la Policía Federal informaron que el detenido es Roberto Gonçalves, quien fue capturado en Boa Vista, estado amazónico de Roraima, delatado por ejecutivos de Odebrecht y del dueño de la constructora UTC, Ricardo Pessoa.
Gonçalves fue director de Servicios de Petrobras entre 2011 y 2012 y fue detenido acusado de recibir unos u$s 1,5 millones en sobornos en cuentas en paraísos fiscales como Bahamas, Suiza y Hong Kong.
El fiscal Roberson Pozzobon dijo que Suiza colaboró con la investigación y que esperan mayores colaboraciones de 33 países diferentes para toda la Operación Lava Jato.
«Lo que llama la atención en este caso de Gonçalves es que la corrupción sería algo así como intergeneracional, ya que este ex funcionario cobró sobornos heredados de su antecesor en el cargo. En Petrobras la sucesión de cargos no sera una simple sucesión, sino en la recaudación de sobornos», dijo Pozzobon.
El fiscal dijo que si bien Gonçalves había dejado Petrobras, siguió cobrando coimas hasta 2014, es decir, dos años después de haber dejado el cargo, como parte de haber facilitado licitaciones en el Complejo Energético de Río de Janeiro (Comperj) de Petrobras.
Gonçalves reemplazó en el cargo a Pedro Barusco, condenado por Moro por recibir sobornos a cambio de permitir un cartel en licitaciones de Petrobras realizado por las principales empresas constructoras del país.
Barusco confesó que cometió actos de corrupción en contratos de Petrobras en los gobiernos de Fernando Henrique Cardoso (1995-2002) y Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010).
El fiscal dijo que no hay pruebas de que Gonçalves haya recibido dinero en nombre de algún partido político como ocurrió con otros directores de Petrobras.
Entre tanto el Superior Tribunal Electoral dio indicios de que puede condenar al presidente Temer por haber recibido dinero ilegal de Odebrecht para el financiamiento de la campaña de 2014, publicó el diario Folha de San Pablo.
El juez instructor, Herman Benjamin, «puede casar la fórmula» presidencial que en 2014 integraron la exmandataria Rousseff y su sucesor Temer, señaló el matutino.
Luego de interrogar a Marcelo Odebrecht y varios exejecutivos de esa firma el juez Benjamin al parecer llegó a la convicción de que Temer y Rousseff son culpables de recibir dinero sucio de Odebrecht, y pedirá que se los condene.
En esa hipótesis el presidente perderá el mandato y se convocará a elecciones indirectas mientras Rousseff perderá sus derechos políticos y estará impedida de ser candidata a cualquier cargo durante ocho años.
