La candidata demócrata para la presidencia de los Estados Unidos, Kamala Harris, cumplió 60 años, en medio de la recta final de una campaña electoral cada vez más ajustada contra Donald Trump quien realizó su primer trabajo en McDonald´s a sus 78 años, siendo el candidato de mayor edad en postularse a la Casa Blanca tras la retirada de Joe Biden.
La edad ha sido un factor crucial en la campaña que Biden abandonó en medio de temores sobre su lucidez. Por su parte, Harris ha apuntado constantemente a la capacidad mental del propio Trump, que le lleva 18 años, para ejercer la Presidencia.
A menos de dos semanas de los comicios del 5 de noviembre, la vicepresidenta demócrata y su rival, el expresidente, protagonizan una contienda cada vez más ajustada, con las últimas encuestas a nivel nacional mostrando un empate a través de los distintos estados.
Este domingo, el magnate republicano hizo una actuación en el estado de Pensilvania, un territorio considerado clave para decidir la elección, así como otros siete estados pendulares («swing states»): Georgia, Michigan, New Hampshire, Nevada, North Carolina, Wisconsin y Arizona.
Trump visitó brevemente un local de la cadena de comida rápida de preferencia, McDonald´s, en Pensilvania, donde hizo las veces de empleado, para competir con Harris que, según el candidato, miente al afirmar que trabajó en su juventud en un comercio de esa cadena.
Papas fritas
El ex presidente republicano llevó su campaña a un local de McDonald´s de Pensilvania, en un intento de desestimar el puesto que sostuvo su oponente en la cadena de comida rápida durante sus años como estudiante universitaria.
Así, Trump asistió a una franquicia a las afueras de Filadelfia, adornado con el característico delantal, y pasó unos minutos cocinando papas fritas junto a los empleados, y repartiéndolas a través de las ventanillas del auto-servicio.
«Amo McDonald´s. Amo los empleos. Y creo que es inapropiado cuando alguien dice por todas partes que trabajó en un McDonald´s (…) pero nunca trabajó en un McDonald’s», sostuvo el republicano en referencia a los dichos de su contrincante.
Desde la campaña de Harris sostienen que la vicepresidenta trabajó en el McDonald´s de la ciudad de Alameda, California, durante el verano de 1983 atendiendo en la caja registradora y cocinando papas fritas, para pagarse sus estudios.
Aunque no ha ofrecido más detalles al respecto, Harris suele reivindicar esta historia como una muestra de cercanía con las clases trabajadoras estadounidenses, distanciándose del magnate inmobiliario que heredó un imperio de su padre.
El magnate republicano, un cliente acérrimo de la cadena, acusó repetidas veces a su rival de haberse inventado esa parte de su currículum.
Desde el entorno de Harris, señalaron que Trump intenta instalar otra versión de los hechos por desesperación. «El no puede entender lo que es un trabajo de verano porque le dieron millones en bandeja de plata que luego desperdicio», señaló Ian Sams, un portavoz de la campaña demócrata.
La compañía de comida rápida ha eludido varias solicitudes de información proveniente de medios estadounidenses, que buscaban confirmar si la candidata demócrata trabajó en el restaurante hace 40 años.
El republicano tiene un largo historial difundiendo informaciones falsas sobre el pasado de sus rivales políticos, y fue uno de los principales defensores de la teoría conspirativa que argumentaba que el expresidente Barack Obama había nacido en Kenia y, por tanto, no estaba habilitado para ser presidente.
Cuestión de antigüedad
Harris recibió la antorcha de Biden luego de que este último protagonizara un debate contra Trump del que salió muy desfavorecido, al punto de despertar preocupaciones sobre su lucidez y capacidad de ejercer el cargo.
Pero la edad del candidato republicano, quien viene tres años menos que Biden, no aparece como un factor central para sus votantes.
Harris ha aprovechado esta contradicción en varias ocasiones incluso acusando a Trump de «eludir debates y cancelar entrevistas por agotamiento» este sábado durante una de sus apariciones en Atlanta, apuntando a la edad de su contrincante. «Cuando responde a una pregunta o habla en un mitin, ¿se han dado cuenta de que tiende a salirse del guión y a divagar, y en general, no puede terminar una idea?», señaló la candidata.
La campaña del expresidente respondió con un comunicado en el que destacó que el magnate está «en perfecta y excelente salud para ser el comandante en jefe de las fuerzas armadas estadounidenses».
El republicano contrarrestó las acusaciones de Harris con un maratónico discurso en Pensilvania el sábado, luego de decir que su oponente «no tiene la energía de un conejo siquiera» durante otro mitin el día anterior.
La leyenda de la música Stevie Wonder acompañó a Harris en una de sus paradas en un suburbio de Atlanta, le cantó el «feliz cumpleaños» y pidió a los ciudadanos «pensar más que en sí mismos al votar». Kamala Harris, al visitar una iglesia bautista cerca de Atlanta, pidió a una congregación negra «acoger valores compasivos mientras otros difunden el odio, siembran miedo y causan caos»-
Una elección ajustada
Trump ganó terreno en las encuestas, revirtiendo las predicciones negativas de los últimos meses, y las elecciones que se aproximan se perfilan como las más estrechas del siglo para Estados Unidos.
La candidatura de Harris, lanzada en julio luego del retiro de Biden, despertó un gran entusiasmo inicial que la puso por encima de su oponente, pero a 16 días de las elecciones los números no parecen tan ventajosos.
Según el último sondeo del portal FiveThirtyEight, el promedio de las encuestas publicadas a nivel nacional, en particular en los estados clave, muestran que Trump ha logrado una ligera ventaja sobre Harris, y tiene un 51% de posibilidades de ganar las elecciones del 5 de noviembre.
Aunque el sondeo general muestra una intención de voto del 48.2% hacia Harris y 46.4% a favor de Trump, el sistema de voto indirecto que rige en territorio estadounidense, en el que juega un rol central el Colegio Electoral, favorece la campaña republicana.
Dos semanas atrás, el mismo portal publicó un pronóstico que daba un 58% de posibilidades de que Harris se alzara sobre Trump.
La diferencia entre ambos candidatos es de menos de dos puntos porcentuales en los estados decisivos, de manera que cualquier modificación estadística podría alterar el resultado.
La ventaja a nivel nacional de la candidata demócrata es menor a la que logró Biden, el actual presidente, durante su campaña de 2020. Tras esas elecciones, Trump se negó a aceptar su derrota, promoviendo el recuento de votos en algunos estados clave y varios litigios que fueron desestimados en los tribunales.
