El Gobierno nacional puso en marcha un nuevo esquema de canje de deuda pública que reemplaza las LeFi —Letras Fiscales de Liquidez— por Lecaps, títulos de corto plazo en pesos con cotización de mercado. La operación, autorizada mediante el Decreto 453/2025, alcanza un monto de hasta $28 billones de valor nominal original y busca redefinir el sistema de tasas de referencia en el país.
Las LeFi, que vencen el próximo 17 de julio, serán valoradas según su precio técnico, mientras que las Lecaps se determinarán por precios de mercado. En la práctica, los bancos que estacionaban liquidez en LeFi deberán migrar hacia Lecaps de corto plazo o fondos de mercado de dinero, lo que implica un cambio estructural en la administración de liquidez.
Desde el Ministerio de Economía explicaron que esta medida se inscribe en el marco de la estrategia de déficit fiscal cero, eliminación de emisión monetaria y saneamiento del balance del Banco Central. Las LeFi habían sido creadas en 2024 para absorber pasivos remunerados como las Leliq, y ahora serán reemplazadas por instrumentos más líquidos y transparentes.
Además del canje, el decreto autoriza una ampliación de emisión de Letras del Tesoro por $50 billones, destinadas a cubrir necesidades transitorias de financiamiento en el segundo semestre del año. Estos nuevos instrumentos tendrán vencimientos en 2026 y plazos inferiores a 90 días, reforzando la flexibilidad del Tesoro.
La tasa de las Lecaps se convertirá en la nueva tasa de referencia, lo que podría generar ajustes en los próximos días. Analistas anticipan que este cambio afectará las tasas que pagan los bancos por plazos fijos y otros instrumentos financieros, en un contexto de reconfiguración monetaria.
El decreto también habilita la cancelación de Letras Intransferibles que el BCRA mantiene en cartera desde años anteriores, comenzando por las de vencimiento más próximo. Estos pagos podrían financiarse con desembolsos de organismos internacionales, lo que contribuiría a mejorar la estructura de pasivos del Estado.
Con esta iniciativa, el Gobierno busca consolidar un nuevo régimen económico, basado en mayor transparencia financiera y menor intervención monetaria. Sin embargo, el impacto real sobre el sistema bancario y el mercado de tasas será observado con atención en las próximas semanas.
Redacción Diario Inclusión










