La dirigencia del Partido Justicialista bonaerense comienza a aceptar que la única salida a sus disputas internas es a través del voto. Tras años de listas únicas y acuerdos forzados, la idea de convocar a elecciones internas reales gana terreno como mecanismo legítimo para definir liderazgos y reconstruir la identidad partidaria.
La unidad como salvoconducto ya no garantiza cohesión ni triunfos. El Frente de Todos y Fuerza Patria son ejemplos de alianzas que fracasaron electoralmente por falta de proyecto común. “La lista de unidad no existe más porque no hay un conductor que sintetice”, sentenció un intendente del interior bonaerense, reflejando el hartazgo de muchos dirigentes.
Axel Kicillof, Cristina Kirchner y Sergio Massa representan estrategias divergentes. Mientras el gobernador acumula poder provincial, Cristina se identifica cada vez más con La Cámpora y Massa mantiene una posición ambigua. En este escenario, Juan Manuel Olmos, titular de la Auditoría General de la Nación, fue claro: “El que quiera reemplazar a Cristina lo tiene que hacer con votos”.
La primera parada será entre febrero y marzo de 2026, cuando se renueven autoridades del PJ Bonaerense. Máximo Kirchner expresó su voluntad de competir, mientras Kicillof se mantiene al margen. “Hay una revolución silenciosa contra el cristinismo”, deslizó un intendente con peso territorial, anticipando una disputa que podría redefinir el mapa interno.
La segunda parada será en 2027, con la definición de la candidatura presidencial. Si las PASO sobreviven, podrían ser el escenario para dirimir diferencias. Si no, una interna partidaria nacional será el camino. Por ahora, los nombres que circulan son Axel Kicillof, Sergio Massa, Gerardo Zamora y Sergio Uñac, aunque todo está en construcción.
La legitimidad de los votos aparece como el único antídoto frente a las amenazas, el fuego cruzado y el desgaste político. “Hace 37 años que no hay elecciones internas de verdad”, recordó un histórico dirigente del PJ Bonaerense. La democracia interna, postergada durante décadas, podría ser el punto de partida para la renovación del peronismo.
✍️ Redacción Diario Inclusión










