El gobierno provincial detectó el desmonte de 47,5 hectáreas de bosque nativo de máxima conservación en Logroño gracias a una alerta del Sistema Nacional de Alerta Temprana de Deforestación. Algoservicio S.A. admitió haber iniciado la tala y la construcción de una planta algodonera sin contar con el Estudio de Impacto Ambiental correspondiente.
De inmediato, las autoridades intimaron al cese de obras, clausuraron el terreno y detuvieron el emprendimiento. Además, el Ministerio presentó una denuncia ante la Justicia que derivó en una acción de amparo colectivo impulsada por la Procuración General de la Corte Suprema de Santa Fe.
El Juzgado de Distrito Civil, Comercial y Laboral de Tostado dictó una medida cautelar que prohíbe cualquier intervención en la zona, ordena el retiro de maquinarias y materiales, y obliga a la empresa a abstenerse de futuros desmontes en un área clasificada como Categoría I – Zona Roja por la Ley Provincial 13.372.
El ministro Enrique Estévez destacó que “la producción y el trabajo se promueven siempre dentro del marco de la ley” y advirtió que incumplir las normas ambientales conlleva “consecuencias severas”. Subrayó además el compromiso de la provincia con un modelo de desarrollo sostenible que proteja la biodiversidad y los recursos hídricos.
La causa también pone en relieve la Ley Nacional de Bosques N.º 26.331, que establece niveles de conservación para estos ecosistemas. Con reportes satelitales quincenales de acceso público, el sistema de alerta refuerza el control y permite a la sociedad civil colaborar en la defensa de los bosques nativos.
📝 Redacción Diario Inclusión
