El juicio contra Lidia Raquel Cardozo, acusada del homicidio de su hijo de 11 años, continúa en la Sala I del Tribunal de Juicio del distrito Centro. La mujer enfrenta cargos por homicidio calificado por el vínculo y lesiones leves calificadas, en una causa que conmociona a la comunidad salteña.
Durante la jornada del lunes 1 de septiembre, tres vecinos del barrio Solidaridad declararon ante los jueces Leonardo Feans, Martín Pérez y Francisco Mascarello. Uno de ellos relató que el niño solía frecuentar su casa desde pequeño y que en varias ocasiones observó lesiones en su cuerpo, las cuales el menor atribuía a caídas o accidentes.
Otro testigo afirmó que, con el paso del tiempo, el vínculo con el niño se volvió esporádico, y que el menor le confesó que su madre no aprobaba esa relación. Estos testimonios aportan elementos sobre el entorno familiar y posibles antecedentes de violencia.
Dos sobrinos de la acusada estaban citados a declarar, pero optaron por no hacerlo, amparados en el derecho que les concede la ley por el vínculo parental. Sin embargo, una declaración previa de uno de ellos fue incorporada por lectura en la audiencia.
Finalizada la ronda de testigos prevista para el día, el tribunal dispuso un cuarto intermedio hasta el martes 2 de septiembre a las 9 de la mañana, cuando se retomará el debate con nuevas declaraciones que podrían ser determinantes para el caso.
📰 Redacción Diario Inclusión