Días atrás, durante la inauguración de una nueva vía que conecta Grand Bourg con Circunvalación Oeste, el Gobernador Gustavo Sáenz fue consultado sobre el caso de los jueces detenidos, en el cual salen a relucir los nombres de los funcionarios Darío Monges y Cristian «El Gringo» Palavecino, hecho que además dió lugar a que Pablo Outes saliera a denunciar públicamente que su gestión hay «atorrantes».
Frente a esto, Sáenz fue contundente, pues maniestó: «si los conoce que los denuncie, es lo que le corresponde a un funcionario público». Además agregó que «todos nos tenemos que presentar a la Justicia si la Justicia nos reclama, aquí no hay fuero para nadie» y condenó que «hay muchos que no se presentan cuando los llaman y pasan los años y pasan las causas y nunca se hace nada».
Lejos de brindar nombres puntuales, el Gobernador ratificó la importancia de que cada uno se presente y «defienda su honor, si realmente asi lo siente y asi lo cree».
Respecto al fuero, un beneficio que gozan los funcionarios políticos, Gustavo Sáenz señaló: «me encantaría que no tenga fuero nadie y que cuando haya una acusación, que vaya, se presente».
Por otra parte dejó entever su postura pues para él cada uno puede opinar lo que quiera, «acá la obediencia de vida se acabó, los que trabajan conmigo o los que están conmigo también tienen derecho a opinar distinto a mi. Que hagan lo que sientan, lo que piensen, eso es la democracia».
Para finalizar su declaración, el Gobernador hizo hincapié en los multiples obstáculos que debió afrontar en 5 años de gestión pero sin bajar los brazos celebró: «seguimos con fuerza y con ganas».