En Argentina y países vecinos, el mate es más que una infusión: es símbolo de encuentro. En los últimos años, la tradición se refresca con ingredientes que aportan matices aromáticos y propiedades saludables.
El coco rallado introduce un toque exótico que contrasta con el amargor clásico de la yerba. Su aroma suave y dulce transforma cada cebada en una experiencia sensorial única.
Una de las ventajas principales radica en las grasas saludables del coco, especialmente los triglicéridos de cadena media, que el cuerpo utiliza como energía rápida y sostenida durante la jornada.
El aporte de fibra del coco rallado favorece el tránsito intestinal y prolonga la sensación de saciedad, un plus para quienes cuidan su alimentación sin resignar placer.
Además, este ingrediente aporta hierro, calcio, magnesio, potasio y selenio, minerales esenciales para el funcionamiento muscular, la transmisión nerviosa y la respuesta inmune.
La sinergia entre los polifenoles de la yerba mate y los compuestos antioxidantes del coco potencia la protección celular y reduce procesos inflamatorios.
Incorporar coco rallado ayuda a regular el metabolismo y controlar el peso, ya que la sensación de plenitud tras el consumo evita picoteos entre horas.
Quienes sufren de molestias digestivas leves o acidez encuentran en el coco un aliado natural, mientras sus ácidos grasos también pueden contribuir al cuidado cardiovascular.
Para preparar un mate con coco rallado, basta con espolvorear una cucharadita sobre la yerba antes de cebar. Tostar ligeramente el coco en sartén potencia su aroma; y usarlo natural evita azúcares añadidos.
🥥 Redacción Diario Inclusión