Por amor o por odio, los caramelos «Media Hora» siempre estuvieron en la boca de los argentinos, pero..¿Que secretos oculta?
Según comenta el periodista Javier Ledesma, se dice que el responsable de la creación de estos caramelos fue el asturiano Rufino Meana, quien llegó a la Argentina en 1937 y abrió una fábrica de golosinas en Chacarita.
Los «Media Hora» vieron la luz, por primera vez, en el año 1952 y fue registrado en 1958 bajo la administración de la sociedad Rufino Meana S.A. Curiosamente, los que más los demandaban no eran niños, sino adultos que comenzaron a consumirlos luego de que se extendiera el rumor de sus beneficios digestivos.
Posteriormente, en el año 1960, tras la muerte de Rufino, fue su hijo Renato Meana quien tomó el control de la empresa asociándose con los hermanos Puente. Esta sociedad permitió que la producción se ampliara, sin embargo, en los 80 la fábrica dejó de producir y se disolvió la unión.
La marca fue comprada por Eduardo Teubal y le cambia el nombre a la empresa por Teubal Trading CO. En los 90 pasaron a la empresa Stani, que en el año 1993 se fusionó con Cadbury y, en 2010, pasó ser propiedad de Kraft Foods.
De mano en mano, finalmente en el año 2012 los caramelitos quedaron bajo la órbita de la multinacional Mondelez, que los fabrica hasta el día de hoy en su planta de Victoria.
Conflicto entre empresas
En el año 2019, inició una batalla legal entre Teubal Trading CO y Mondelez por los caramelos «Media Hora». Pues Teubal Trading solicitó una medida cautelar en los términos del art. 50 del ADPIC a fin de que se ordene a Mondelez Argentina S.A. cesar en la promoción, distribución, venta y uso de la marca «1/2 HORA».
A tal fin inicialmente expuso que intentó de manera extrajudicial, sin resultado, que la demandada retomara las negociaciones para la firma de un nuevo contrato y abonara los importes adeudados en concepto de regalías por el uso de la marca.
Relató la historia de la marca y la trayectoria de su parte como continuadora de la firma creadora de los caramelos identificados con el signo.
Explicó que la marca fue registrada originariamente en 1958 –en la clase 22 Nacional– y renovada por última vez en 1989 –en la clase 30 Internacional–, cuyo vencimiento operó el 21-3-2013, sin que fuera renovada debido a «una cuestión insalvable de orden interno». Añadió que el 23-5-2016 fue solicitada por la actora mediante Acta N° 3.507.629 para distinguir todos los productos de la clase 30. Dijo que en 1989 la actora y B.S.A. –copropietarios de la marca–suscribieron un contrato de licencia con Productos Stani S.A.I.C. mediante el cual licenciaron la explotación y uso de la marca a cambio de una regalía mensual, consistente en un porcentaje de las ventas netas de los caramelos identificados con la marca «1/2 HORA», que establecía un plazo de duración de diez años con la opción de extenderlo por el mismo plazo. Agregó que si bien expiró en 2009, en la práctica continuó generando derechos y obligaciones hasta junio de 2016, fecha en que la demandada cesó en el pago de las regalías.
Lo cierto es que ambas empresas expusieron sus puntos y el juicio no ha tenido un cierre.