Los empleados municipales de Tartagal atraviesan una crítica situación laboral marcada por atrasos salariales, incumplimientos de acuerdos previos y condiciones laborales precarias. Frente a este panorama, el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (SOEM), encabezado por Aníbal Esquivel, así como el gremio ATE con Sandra Hoyos como Secretaria general, convocaron a una asamblea que se realizará hoy a las 19 horas para definir medidas de fuerza.
La principal preocupación radica en el incumplimiento del acta acuerdo firmada por el Ejecutivo municipal, que contemplaba el pase a planta permanente de trabajadores y la regularización de contratos pendientes. Según denunció Esquivel, aún restan 25 contratos sin concretarse, y no existe voluntad política para resolver esta situación.
Además, se suma el reclamo por el atraso en el pago de salarios a los trabajadores eventuales, quienes no cobraron la primera quincena de julio, mientras que algunas áreas como Obras Públicas y Pavimento sí recibieron sus haberes. A esto se agregan deudas por embargos judiciales alimentarios que tampoco fueron depositados, generando aún más incertidumbre económica en numerosas familias.
En declaraciones previas, Esquivel señaló: “No han cumplido con lo firmado y tampoco hay predisposición para resolver los contratos ni los pagos atrasados. Hay trabajadores que además sufren persecuciones y malos tratos dentro del municipio”.
El clima de malestar escaló la semana pasada cuando algunos trabajadores iniciaron protestas en la base de trabajo para exigir respuestas. Sin embargo, el sindicato espera que la asamblea de hoy sirva para consensuar medidas concretas ante la falta de diálogo con el Ejecutivo que lidera Franco Hernández Berni.
Por su parte, Sandra Hoyos, secretaria general del gremio ATE expresó: “En esta asamblea vamos a pedir aumento salarial para lo que queda del año, el pase a planta permanente de los contratados y para los eventuales, cosas que han quedado inconclusas e incumplidas por parte del Ejecutivo municipal en la primera acta que se ha firmado”. Asimismo ratificó los comentarios de Esquivel, acusando que se están «sobrepasando todos los límites» ya que existe un destrato hacia los trabajadores. Esa misma falta de respeto se extiende hacia los gremios, según Hoyos, pues como defensores de los trabajadores y sus intereses, no fueron llamados a una negociación con el intendente. «Hoy existe un apriete hacia los sindicatos con respecto a las retenciones», aseguró la secretaria de ATE.
En paralelo, desde el municipio aseguraron en medios locales que el atraso salarial se debe a la crítica situación financiera que atraviesa Tartagal, agravada por la caída de la coparticipación provincial y nacional, pero hasta el momento no se presentaron soluciones concretas.
La situación pone en alerta a la comunidad tartagalense, ya que un paro o protesta podría afectar los servicios públicos esenciales. Mientras tanto, los trabajadores esperan que la asamblea a realizarse en el gremio ATE, defina un camino para salir del conflicto, que se extiende sin respuestas claras desde hace meses.
Redacción: Diario Inclusión.












