A medida que crecen las solicitudes de visa para ingresar a Estados Unidos, de igual forma aumentan las diversas tácticas de estafa, que aprovechan la urgencia, el desconocimiento o la expectativa de los solicitantes.
Entre los casos más frecuentes se encuentran sitios web falsos que simulan ser páginas oficiales del gobierno estadounidense, estafadores que se presentan como supuestos “consultores migratorios” y correos electrónicos que prometen acelerar el trámite a cambio de dinero.
Estas prácticas afectan económicamente a las víctimas y comprometen sus datos personales, junto a sus posibilidades reales de obtener el visado. Además, según el portal oficial del gobierno estadounidense, usa.gov, muchas de estas estafas pasan cuando los solicitantes no verifican la autenticidad de los canales que usan para realizar el trámite migratorio.
Cómo atacan los estafadores que se hacen pasar por asesores migratorios
Una de las estrategias más comunes es presentarse como “notarios” o “consultores” que aseguran tener contactos dentro de las embajadas o experiencia en procesos migratorios. En Estados Unidos, sin embargo, un notario solo está autorizado a certificar firmas, no a ofrecer asesoría legal.
Según advierte el portal web usa.gov, “hay que evitar contratar notarios para resolver sus asuntos de inmigración. En EE. UU. un notario solamente verifica que la firma de ciertos documentos sea legal. Pero no son abogados, ni están certificados para dar asesoría”.
Quienes caen en estas trampas suelen pagar por formularios que son gratuitos o por una supuesta representación que no tiene ninguna validez jurídica. Algunas víctimas han perdido sus turnos de entrevista o han recibido documentos mal gestionados, lo que puede repercutir en el rechazo de la visa.
Qué señales evidencian que un sitio web es falso
Una de las características más fáciles de detectar es el dominio web: ningún sitio oficial de Estados Unidos termina en .com o .org. Todos los portales del gobierno terminan en .gov.
Por eso, se debe evitar entregar datos o realizar pagos en plataformas que utilicen dominios dudosos. Usa.gov advierte que los trámites deben hacerse exclusivamente en los sitios oficiales, como los del USCIS o el Departamento de Estado.
Además del dominio, otras señales de alerta incluyen errores ortográficos, diseño amateur o la ausencia de protocolos de seguridad como el cifrado HTTPS. También, es sospechoso que se solicite dinero antes de completar un formulario oficial, o que se prometan tiempos de espera más cortos a cambio de pagos adicionales.
Cómo proceder ante cualquier comunicación del gobierno estadounidense
Una de las pautas principales es conservar toda la documentación relacionada con el proceso. Esto incluye formularios completados, correos recibidos y, sobre todo, los recibos entregados por el USCIS.
Usa.gov señala que se deben “guardar copias de los documentos que entregue y de las cartas que reciba del Gobierno de EE. UU.”. Tener un archivo con esta información permite realizar un seguimiento preciso del trámite y, en caso de ser víctima de una estafa, presentar pruebas ante las autoridades.
También, se debe conservar en formato digital cada paso dado durante el proceso, porque muchas veces los estafadores eliminan sus huellas tras concretar el fraude.
Qué hacer si ya fue víctima de una estafa de este tipo
Si una persona sospecha que fue engañada durante el trámite de su visa, debe reportarlo de inmediato. En el portal usa.gov hay un botón específico para denunciar estafas.
Al presionarlo, se abrirá un formulario en el que se debe: “indicar dónde tuvo lugar la estafa, identificar el tipo o categoría de la estafa y aportar detalles adicionales”.
Este informe puede ayudar a las autoridades a rastrear patrones de fraude, cerrar sitios ilegales y evitar que otras personas caigan en la misma trampa. Aunque no siempre es posible recuperar el dinero perdido, realizar la denuncia contribuye a visibilizar estas prácticas y fortalecer los mecanismos de prevención.









