🛒 Para esta receta necesitás 160 gramos de arroz arborio, 250 gramos de calabaza pelada y cortada en cubos, una cebolla mediana picada, 800 mililitros de caldo de pollo caliente, 120 gramos de manteca, 100 gramos de queso parmesano rallado, unas hojas de menta al gusto, 40 gramos de almendras fileteadas y aceite de oliva, sal y pimienta a gusto.
🔪 Comenzá salteando la cebolla y la calabaza en cubos en una sartén con un chorrito de aceite de oliva y una pizca de sal. Cociná a fuego medio hasta que la cebolla esté transparente y la calabaza empiece a ablandarse, unos ocho minutos.
🍲 Agregá el arroz arborio y tosta los granos hasta que se vuelvan translúcidos, alrededor de dos minutos. Incorporá una primera cucharada de caldo caliente y revolvé con cuchara de madera. A medida que el líquido se absorbe, continuá añadiendo más caldo de a poco, siempre revolviendo, para lograr la textura cremosa típica del risotto. Este proceso llevará unos 17 minutos.
🧈 Una vez que el arroz esté al dente, retiralo del fuego e incorporá la manteca y el queso parmesano rallado. Mezclá enérgicamente hasta que la preparación quede untuosa y bien ligada. Ajustá la sazón con sal y pimienta, y si deseás un toque fresco, añadí algunas hojas de menta picadas.
🍽️ Serví el risotto caliente, espolvoreando por encima las almendras fileteadas para aportar crocancia y un chorrito extra de aceite de oliva. Podés acompañar este plato con una ensalada verde o un vaso de vino blanco fresco. Disfrutá esta receta que une sabor, textura y calidez en cada cucharada.
🍁 Redacción Diario Inclusión










