De acuerdo con economistas y analistas financieros, el Gobierno reconoce que el diseño actual del mercado cambiario le impide acumular reservas sin provocar saltos en el dólar. En un escenario de “poca profundidad”, una compra relevante de divisas —advirtieron— podría disparar el tipo de cambio y reactivar la inflación.
En este marco, Javier Milei buscó aclarar su postura: aseguró que no comprará dólares “como un delirante”, frase que generó lecturas cruzadas. La definición no implica una negativa total a intervenir, pero sí marca una distancia con lo expresado por el ministro de Economía, Luis Caputo, quien había afirmado que se buscaría acumular reservas.
Inflación en ascenso: alimentos lideran las subas
Mientras el Gobierno debate su estrategia cambiaria, la inflación vuelve a acelerarse. Relevamientos privados —como ECG y consultoras sectoriales— registraron aumentos semanales de entre 1 % y 1,8 % en alimentos y bebidas, señalando un nuevo impulso en los precios.
A la par, rubros regulados como tarifas, combustibles, luz, gas, agua y transporte también se incrementan por decisión oficial. Todo indica que noviembre y diciembre serán meses “muy calientes” en materia inflacionaria, superando incluso el podio que dejó octubre.
El dólar retrocede mientras los precios suben
El tipo de cambio oficial descendió cerca de 6 % desde las elecciones, ubicándose por debajo del techo previsto. Sin embargo, los precios minoristas siguen acelerándose, especialmente en los alimentos.
Esta combinación —dólar a la baja e inflación en alza— preocupa al Gobierno, que observa cómo se traslada a góndolas el corrimiento cambiario registrado entre julio y agosto.
Consumo golpeado y empresas con balances negativos
El deterioro del consumo interno se profundiza. Las principales firmas alimenticias que cotizan en Bolsa informan pérdidas no sólo por margen reducido, sino también porque venden menos.
Carnes, lácteos y frutas encabezan las subas en noviembre, mientras que productos envasados presentan mayor estabilidad.
El mercado acompaña, pero pone límites
El mercado financiero continúa respaldando al Gobierno, aunque condiciona su apoyo. Los analistas coinciden en que la estabilidad no puede sostenerse si la administración convierte en doctrina la decisión de no comprar dólares.
El desafío de fondo es claro: salir de un Banco Central con reservas netas negativas y reconstruir su balance. Para ello —advierten— no bastará con el “rolleo” de deuda; será imprescindible algún nivel de acumulación de divisas.
Redacción. Diario Inclusión.










