La escuela de Zanja Honda atraviesa una situación alarmante por la falta de agua potable. Según relató su directora, Claudia, el establecimiento —que funciona con jornada extendida y alberga tanto nivel primario como secundario— lleva más de tres días consecutivos sin suministro en las cañerías, lo que obliga a depender de la llegada de camiones cisterna.
“Esta mañana no teníamos ni una gota de agua y, sin embargo, teníamos que recibir a los chicos, no se los puede mandar a la casa”, explicó la directora, al remarcar que los alumnos desayunan, almuerzan y meriendan en la escuela, además de necesitar el recurso para la higiene y el uso de los sanitarios.

El establecimiento cuenta con 262 estudiantes y un solo tinaco, pero no dispone de una bomba que permita subir el agua al tanque principal. “Tenemos el tanque, pero sin la bomba no podemos abastecernos. Es urgente que nos la den”, insistió Claudia.
La falta de agua genera un fuerte malestar entre la comunidad educativa, que debe pedir continuamente a las autoridades que no olviden enviar el suministro. “Creo que debería ser prioridad atender las necesidades de las escuelas, donde están los niños”, subrayó la directora.
Mientras tanto, los docentes y directivos continúan recibiendo a los estudiantes en condiciones críticas, esperando una respuesta inmediata que garantice el derecho básico al agua en la institución.
Redacción: Diario Inclusión.