La Justicia penal de Tartagal confirmó la imputación de cuatro médicos del Hospital Juan Domingo Perón por su presunta responsabilidad en la muerte de Agustín Herrera, un joven de 17 años que ingresó con síntomas compatibles con apendicitis, caminando y en buen estado general, pero que terminó perdiendo la vida por una peritonitis derivada de una presunta falta de diagnóstico y tratamiento oportuno.
Las audiencias de imputación fueron fijadas para los días 17 y 18 de diciembre, según informó el abogado querellante de la familia, Rambert Ríos, quien destacó que esta instancia se habilita cuando existe evidencia suficiente para investigar una posible conducta delictiva.
Quiénes son los profesionales imputados
Los médicos que enfrentarán el proceso de imputación son:
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Dr. Padilla
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Dra. Gorgal
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Dr. Serpa
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Dr. Farachi
La investigación reunió elementos como la historia clínica, los resultados de la autopsia y los descargos de los propios profesionales, que serán analizados para determinar si existieron omisiones o negligencias en la atención del adolescente.
Ríos recalcó que la imputación no implica culpabilidad, pero sí constituye un paso esencial para esclarecer los hechos y garantizar el derecho de defensa tanto para los médicos como para la familia del joven.
Las conclusiones de la autopsia y el cuadro clínico
La autopsia determinó que Agustín falleció por peritonitis de origen apendicular, que derivó en una sepsis generalizada y falla multiorgánica. De acuerdo con la querella, se trata de un cuadro que podría haberse revertido con un diagnóstico preciso y una intervención quirúrgica temprana.
El adolescente había ingresado caminando, con dolores abdominales intensos, y fue medicado sin que se avanzara en estudios complementarios para confirmar o descartar la gravedad del cuadro abdominal.
El proceso judicial y los próximos pasos
Una vez formalizada la imputación, la causa ingresará en una etapa investigativa que se extenderá durante al menos cuatro meses, período en el cual los imputados podrán presentar pruebas, defender su accionar y solicitar medidas.
El abogado de la familia señaló que permanecerá atento al desarrollo del expediente y destacó el trabajo del fiscal a cargo. Tras la feria judicial, prevista para enero, el caso retomará su curso con nuevas audiencias y diligencias.
Conmoción en la comunidad y pedido de justicia
La muerte de Agustín generó un profundo impacto en Tartagal, donde familiares, amigos y vecinos acompañaron marchas y reclamos en busca de respuestas. La familia sostiene que el joven “hoy podría estar vivo” y que su pérdida expone la necesidad de revisar protocolos y responsabilidades dentro del sistema de salud.
“Es una noticia que nadie desea dar, pero corresponde avanzar para que se determine qué pasó y por qué un joven que ingresó caminando terminó muerto”, expresó el abogado querellante.
Redacción: Diario Inclusión.
