Detrás de su aspecto espinoso y su cocción laboriosa, el alcaucil —o alcachofa, según el diccionario— esconde un imperio que combina campo, ciencia y tragos. La ciudad de La Plata, donde inmigrantes italianos comenzaron a cultivarla hace casi un siglo, hoy concentra más del 50% de la producción nacional, con unas 1.700 hectáreas sembradas en todo el país. Pero lo interesante no está sólo en el plato: las hojas del alcaucil tienen propiedades digestivas y hepatoprotectoras que alimentan industrias insospechadas.
Del escabeche a la farmacia
La sustancia estrella es la cinarina, un compuesto que estimula la producción de bilis y ayuda a digerir comidas pesadas. Este principio activo es clave en medicamentos como Hepatalgina, uno de los hepatoprotectores más conocidos del mercado argentino, hoy en manos del laboratorio Elea Phoenix, propiedad del empresario Hugo Sigman —el mismo que produjo localmente la vacuna AstraZeneca durante la pandemia.
Pero Hepatalgina no es la única. Existen otros productos farmacéuticos con base de alcaucil como Hepachofa, Chofitol, Bahuepat y Palatrovil, que siguen explotando los beneficios digestivos del vegetal.
Cynar: un trago con historia y hojas
El otro gran jugador en esta historia es Cynar, un licor amargo creado en Italia en 1952 por el excéntrico Ángelo Dalemole. El nombre proviene del nombre científico del alcaucil: Cynara scolymus. Hoy pertenece al grupo Campari y desde 2012 se produce en la localidad de Capilla del Señor, provincia de Buenos Aires. Aunque es más conocido en Europa, Cynar está ganando terreno como ingrediente de coctelería en Argentina, impulsado por el revival de bebidas amargas.
Sello platense y oportunidad económica
Desde 1994, los productores de La Plata se agruparon en la organización Alcachofas Platenses, y en 2016 lograron que sus alcauciles obtuvieran el sello de indicación geográfica, que garantiza su calidad y origen. Esta distinción no solo abre puertas a la exportación sino que también posiciona al producto como un ícono local.
Además, el extracto de alcaucil empieza a ganar terreno en la industria cosmética y de suplementos naturales, donde se lo emplea como ingrediente detox o antiinflamatorio, según destacan varias marcas del rubro wellness.
Redacción: Diario Inclusión.










